--.:Cap. IX a:.--
Los sonidos de sus pisadas débiles eran los únicos zumbidos que ella podía escuchar. Su ropa de casa le parecia demasiado vergonzosa y, que decir de sus pantuflas rosas... Su cara (totalmente limpia) impedía el contacto visual con el joven que caminaba a unos cuantos pasos mas adelante, pero su orgullo e interés la hacían fuerte. Habían pasado solo unos segundos desde que "él" había tocado a su puerta para invitarla a su apartamento, en ese momento ella se encontraba tan nerviosa que tan solo pudo sacar una respuesta positiva de sus labios, olvidando por completo su atuendo ligero y cómodo... Dejando su taza de café en alguna parte de su sala y su programa de televisión olvidado por completo entre los canales de cable que lo repetían solo una vez mas -Llegamos- exclamo el hombre moreno por delante de ella. -Espero que no te importe el desorden. Solo a pasado una semana desde que me mude- Ash sonrió tiernamente y deslizo su palma sobre la perilla de la puerta, dejando a la vista su apartamento
La chica a su izquierda, se sonrojo al instante. Ese abogado le parecía tan tierno y atractivo que sus esfuerzos por contener a sus hormonas, se asemejaban a una lucha constante con algo demasiado fuerte -Bueno, no puedo decir nada de tu apartamento cuando ya me has visto en pijama- bromeo intentando esconder su enrojecimiento -Además- inquirió después de controlar sus impulsos -No creo que este tan mal- sus ojos verdes se clavaron en el apartamento del chico azabache. Miles de cajas impedían la entrada principal. Hojas con letras impresas descansaban en la alfombra. Restos de Sopas instantáneas inundaban la pequeña cocina... Y... La sala era el único lugar disponible para incorporarse cómodamente…
-No tengo mucho tiempo para sacar la basura y esas cajas son las cosas que deseo acomodar en uno de estos días- dijo un poco apenado por la insistencia de la mirada de su invitada. -Pero... Creo que te sentirás cómoda en la sala-
-No hay problema, ¡De verdad!-
-Bueno, ahora iré a sacar los papeles de tu caso. Ponte cómoda- la silueta del abogado atractivo desapareció tras su ultima palabra. Misty ahora, se encontraba sola, en un apartamento ajeno, con miles de pensamientos locos rodando en su mente y deseando que sus hormonas se comportaran civilizadamente.
Desvió su mirada que divagaba por los lugares mas lejanos a su imaginación y centro sus ojos en el cómodo sillón azul.... Aquel que había causado el bochorno con Ketchum... Lo miro unos segundos mientras encontraba grandes diferencias al que se encontraba en su apartamento y camino lentamente hacia el. Su palma recorría la suave tela que lo cubría, y los deseos de recargarse en el respaldo acolchonado aumentaban. Era increíble como la sensación de familiaridad recorría su cuerpo -¿Podría ser?- murmuro para si y dejo a un lado el cómodo sillón. Camino lentamente hacia donde el televisor se encontraba y sin darse cuenta sintonizo su canal favorito
-¿Dr. House?- se escucho la conocida voz del dueño del apartamento -¿Te gusta?- volvió a cuestionarla con algo de curiosidad
-Y-yo... No...- balbuceo la pelirroja algo apenada por su mal comportamiento e intento presionar de nuevo el botón donde la señal se apagaba -Si... Me gusta... Pero... No se como se encendió el televisor- dijo intentando aparentarse normal, pero solo hacia que el momento fuera mas vergonzoso para ella
-Mala suerte. Yo soy fan de ese doctor- la distancia que los separaba se fue haciendo mas angosta y en un parpadear, él ya se encontraba a su costado buscando algo entre los cajones de su buró -Y tengo su serie completa- un par de DVD's inundaron las pupilas de Misty. Era increíble que no se hubiera dado cuenta que toda la colección de esa serie estuviera a unas puertas de su vida... Las portadas del los discos eran tal y como se las imaginaba. Unos colores Azules cubrían el fondo del primero, en el cual, los rostros de los ya conocidos personajes inundaban la parte superior, y al costado de ellos un hombre mayor de 35 años recargado en su inseparable bastón...
-Es una gran serie- afirmo la Oji-Verde al terminar de observar las imágenes que inundaban sus pupilas y avanzo unos cuantos pasos para alejarse del chico que la miraba sorprendido por su comentario –Cuando el trabajo del acuario acaba, es la única serie que veo antes de dormir- inquirió antes de verlo de nuevo.
-¿Tu te encargas del Acuario?- la cuestiono con curiosidad mientras resguardaba su colección dentro del buró.
-Si... Bueno... No exactamente "yo sola", mi amiga Sakura me ayuda mucho-
-Pero yo hablo de tus hermanas... Ellas están peleando ese establecimiento y según me informo su abogado, la propiedad es el patrimonio que su madre les dejo-
-¿Ellas dijeron eso?-
-Exactamente, esas no fueron sus palabras. Por esa razón quería hablar personalmente contigo- Ash se exalto un poco y coloco su mano bajo su mentón -¿Puedo tutearte?- su voz se quebró en el ultimo momento. Rasco su cabeza con pena y sonrió tiernamente... Otra vez...
-C-claro!- Misty titubeo por un instante... Él era demasiado cortes y atento... Quizás el único hombre con esas cualidades en la ciudad...-Llámame Misty- acentuó su nombre para mayor comprensión y coqueteo un poco con sus pestañas antes de guiñear su ojo
-Bueno, Misty. A mí llámame Ash-
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XD se las dejo incompleta para tener que actualizar el miércoles jajajaj!!!
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